Hace un par de meses hicimos estos cupcakes, solemos hacerlos bastantes veces porque son esponjosos y no son excesivamente dulzones. Los llevamos a una cena de San Valentín , de ahí la decoración y clasificando fotos he visto que nunca había editado esta receta.
Espero que la disfrutéis.
60 ml de aceite de girasol
160 gramos de azúcar
1 huevo L
1 cucharada de cacao sin azúcar
1 cucharadita de colorante en pasta rojo
1 cucharadita y media de extracto de vainilla
125 ml de leche semidesnatada
1 cucharadita de zumo de limón
150 gramos de harina
1/2 cucharadita de bicarbonato
1 cucharadita de vinagre de vino blanco
Para la cremita de queso:
120 gramos de mantequilla
300 gramos de azúcar glas
125 gramos de queso crema
1 cucharada de leche semidesnatada
Ponemos la leche en un vaso y le agregamos el limón. Esperamos que reaccione la mezcla (se corte) durante unos 5-10 minutos. Reservamos. Mientras encendemos el horno a 170º. Batimos el azúcar y el aceite, cuando esté ligado añadimos el huevo y la vainilla, seguimos batiendo. Tamizamos el cacao y la harina, se lo incorporaremos alternándolo con la mezcla de leche y limón. Por último en un vaso donde esté el vinagre añadimos el bicarbonato , empezará a burbujear. Es el momento de incorporarlo a la la masa. Cuando esté homogéneo añadimos el colorante.
Repartimos la masa en las 24 capsulas. Horneamos 20 minutos 170 º.
Dejamos enfriar.
Preparamos la crema de queso. Tamizamos el azúcar y lo batimos con la mantequilla y la leche. Cuando esté blanquita (alrededor de 8 minutos), agregamos el queso crema. El truco es añadir el queso bien frio para que coja consistencia.
Y decoramos ¡¡¡¡
Están super buenos. Espero que os haya gustado. Mil besitos